Pues aquí estoy en el
Club de las mamás y no puedo sentirme más identificada con el estereotipo de desastre pero es cierto que soy mucho más que eso.
Siempre se me queda todo a medias, casi siempre salgo de casa sin peinar y rara vez cumplo mis planes. Vamos un auténtico desastre.
Aunque también soy creativa. Mis sobrinos me llaman "la tía creativa" y yo me siento muy orgullosa de ello. Nuestra habitación de los juguetes también es un rincón para las manualidades y dedicamos mucho tiempo a hacer Cosas Pitipitosas...aunque la mayoría de las veces no las publico en el blog. ..desastre :(
Al leer el tipo de madre exigente también pienso que me puedo incluir en ese grupo. Quiero que las peques aprendan y sean las mejores en todo lo que hagan: bilingües, educadas, perfeccionistas,... En el fondo todas somos mamás exigentes porque buscamos lo mejor para nuestros hijos, no?
Por último también me considero una mamá social. Sí, de las que se para con todas las madres que ve para hablar de sus hijos o de los míos. Yo no era así pero al vivir en un pueblo, pues al final, todos nos conocemos y todos coincidimos en los mismos sitios ya que no hay mucho donde elegir. Mi marido, santo varón de la casa, no lo soporta y se desespera pero no le queda más remedio que aguantar porque las niñas van aprendiendo y ya se empiezan a parar por la calle a hablar con sus amiguitos, jajaja!
Y, por supuesto, soy una mamá pesada....muy pesada. Repito cien mil veces todo, no paro hasta que se hacen las cosas bien y, aunque no me siento orgullosa, grito mucho.
A pesar de todas los tipos de madre que puedes ser en un momento u otro, o los que te gustaría ser, de una cosa no tengo duda. TODAS somos MADRES ENAMORADAS de nuestros pequeños (sí, me pongo un poco ñoña...) y nos tiramos el resto de nuestra vida pensando siempre en ellos.
Así que, en resumen, soy un montón de madres en una sola: desastre, creativa, exigente, social,...pero sobretodo soy su mamá.
